_________________________________________________________________________________________

Finlandia: los secretos del mejor sistema educativo del mundo

Leo Pakhin, miembro del Consejo Educativo del país nórdico, visitó Euskadi hace una semana y reveló algunas de las claves del éxito.


Finlandia es la envidia del resto del mundo por muchas razones, pero hay una que destaca por encima de todas: un sistema educativo que encabeza un día sí y otro también los ranking internacionales. "Los finlandeses somos gente simple que hace cosas simples", aseguró el experto finlandés Leo Pakhin en su conferencia de apertura de las jornadas con las que el proyecto pedagógico Hik Hasi celebró su vigésimo cumpleaños a finales del pasado mes.

- Escuchándole, da la impresión de que Finlandia se ha convertido en el país europeo con mejor puntuación en PISA por sorpresa.

- En cierta medida es así. Fue algo muy sorprendente porque ni lo esperábamos ni lo íbamos buscando, aunque es cierto que nos agrada, porque demuestra que hacemos bien las cosas.

- ¿Mantener esa posición les plantea algún tipo de presión? ¿Se traslada esa presión a los alumnos?

- En absoluto. La jornada escolar, de hecho, es más corta que en otros países. Los más pequeños no pasan más de cuatro o cinco horas en la escuela. Tienen que tener tiempo para otras cosas, para estar en casa... Es importante que la escuela no llene todo el día, porque también hay vida más allá de la escuela.

- En un lugar donde hay una reforma educativa cada década, como mínimo, llama la atención que mantengan principios establecidos hace un siglo y les vaya tan bien.

- La base -que cada uno desarrolle sus potencialidades en aquello en lo que es mejor- y el planteamiento de las materias fundamentales se mantiene, pero en la década de los 60 del pasado siglo hicimos una gran reforma, que abrió la escuela a todos y la hizo realmente inclusiva. En 1999 también hubo una ley importante que descentralizó el sistema e introdujo cambios desde el punto de vista funcional, pero no sobre la sustancia de la escuela. Es cierto, en cualquier caso, que la estabilidad es una de las claves de nuestro sistema educativo. Es, además, un sistema muy flexible y muy cercano.

- En el que las comunidades locales juegan un papel fundamental.

- Absolutamente fundamental. Los ayuntamientos deciden cuántas escuelas hay en la localidad, cómo se distribuyen los alumnos, contratan a los maestros, comparten la financiación con el gobierno...

- Las que no participan en la financiación son las familias.

- No, tanto la enseñanza como el material escolar, el comedor o el transporte son gratuitos para todos. Aun así, el coste por alumno no se encuentra entre los más altos de Europa.

- ¿La gratuidad se extiende a las escuelas privadas, si es que las hay?

- Hay muy pocas. De las 2.800 escuelas de Finlandia, apenas 50 son privadas. Son centros vinculados a confesiones religiosas o a determinados modelos pedagógicos. Deben presentar su proyecto y, si es aceptado, tienen condiciones similares a la pública. Lo que ocurre es que la inmensa mayoría de la gente quiere llevar a sus hijos e hijas a las escuelas públicas por su altísima calidad.

- ¿Ese nivel de calidad es uniforme?

- Es uniforme porque a los que obtienen peores resultados o tienen algún problema no se les castiga, sino que se les ayuda para que vuelvan a alcanzar el máximo nivel.

- Hasta ahora se ha referido a lo que tienen, pero lo que no tienen también llama la atención: apenas tienen exámenes, no tienen inspectores, ni libros de texto comunes para todos... De paso, tampoco tienen abandono escolar, más allá de un irrelevante 0,3%.

- Así es, y eso se debe a la otra clave del sistema educativo finlandés: la confianza. En los niveles no universitarios apenas hay exámenes generales, salvo uno que se hace al finalizar secundaria, más por mantener una tradición que por otra cosa. Con los exámenes lo único que se consigue es que el trabajo se oriente a aprobarlos, y en nuestro caso más importante que lo que aprenden los alumnos es el proceso mismo de aprendizaje. En cuanto a los inspectores, ¿para qué? Ya hay veinte pequeños inspectores a tiempo completo en cada clase, y ellos son los primeros que ven si algo anda mal.

- A eso se le añade un profesorado altamente cualificado y muy bien considerado.

- El profesorado es una pieza fundamental. Desde 1979 está establecido que para dar clases en una escuela ordinaria hay que cursar una carrera de cinco años, y para las escuelas especiales de seis. Es obligado, además, realizar un master. Que los profesores estén tan bien preparados hace que, además de hacer muy bien su trabajo, tanto las familias como los alumnos confíen en ellos.

- Aunque los finlandeses de lengua sueca apenas son el 6% de la población, tanto el sueco como el finlandés se consideran lenguas maternas y ambas se aprenden en la escuela sin que afecte a los resultados.

- No solo no afecta a los resultados, sino que muchos estudios han demostrado que la enseñanza bilingüe, trilingüe en nuestro caso porque todos aprenden como mínimo una tercera lengua, mejora la capacidad de aprendizaje. En zonas en las que no se habla sueco a los alumnos les cuesta entender por qué tienen que aprender una lengua que no escuchan a su alrededor, pero para nosotros el sueco es básico para formar parte de la comunidad de países nórdicos.

- La crisis económica también afecta a Finlandia. ¿Se salvará su sistema educativo de los recortes?

- Estamos en un momento complicado, la recesión también nos afecta. Creo que la educación básica va a sobrevivir como está, pero el foco está puesto en la secundaria, donde es probable que se planteen reformas para reducir costes. De todas maneras, a pesar de la gran pluralidad política -hasta ahora hemos tenido un gobierno con siete partidos-, estamos tan convencidos de que la escuela gratuita y de calidad es el centro de todo que el acuerdo político sobre la educación es muy sólido.

Fuente: Elcorreo.com

Cómo impresionar cuando eres el más joven de tu equipo de trabajo

Todos debemos empezar en alguna parte, pero ser el más joven en un equipo de trabajo nunca es fácil y puede ser complicado ganar confianza y credibilidad cuando estás rodeado de personas con más experiencia que tú. Estas son las recomendaciones de Reqlut


Para salir victorioso de esta situación se necesita paciencia y trabajo duro, pero también hay ciertas cosas concretas que te ayudarán a llamar la atención y a ganar la confianza y el respeto de tus colegas.

Aprende el negocio

Uno de los principales problemas de ser el más nuevo y el más joven de la empresa es que hay mucho que no sabes sobre tu área de trabajo o  compañía. Pero esto es muy fácil de solucionar.

Mientras más investigues, más posibilidades tendrás de impresionar a tu equipo. Parte por leer el sitio web y las redes sociales, sigue con la prensa y las publicaciones internas. Es bueno que integres esta costumbre a tu rutina diaria, porque este arsenal de conocimientos no sólo te ayuda a parecer mejor preparado (y demostrará tu compromiso con la empresa) sino que también te hará sentir más seguro.

Demuestra que eres alguien confiable

Es importante no sólo dar una buena primera impresión, sino que también seguir impresionando. Cuando te empiecen a conocer tus colegas querrán probarte en distintas tareas. Llega temprano a las reuniones, termina los proyectos a tiempo y cumple todo lo que prometas. Cuida tu apariencia y puntualidad.

Suena simple, pero mientras más consistente seas más fácil será para tus compañeros confiar en ti.

Hazte cargo de tus errores

Sería perfecto si pudiéramos hacer todo justo como nos piden. Pero desafortunadamente todos cometemos errores, especialmente cuando estamos empezando. La mayoría de los profesionales cometen el error de tratar de tapar lo que hicieron mal o pedir disculpas en exceso.

Lo mejor es admitir los errores, porque eventualmente todo se sabe y podrías terminar dañando tu imagen. Pero nadie en tu equipo querrá escuchar sólo problemas, sino que también quieren saber cómo solucionarlo. Presenta el problema y luego propone una solución, hablando de forma calmada y profesional. Además, asegúrales que esto no ocurrirá en el futuro.

Ve más allá

En vez de hacer sólo que te piden, trata de adelantarte a tus tareas. Llega a las reuniones preparado y reúne toda la información que puedas para que estés listo para dar tu cien por ciento. Mantén una actitud positiva, aunque las cosas se pongan estresantes, y aprovecha de hacer cosas nuevas aunque no tengan que ver con la descripción de tu trabajo.

Fuente: Reqlut

Las características del CV por las cuales los postulantes no pasan el primer filtro

Experto señala que existen palabras que no favorecen al perfil curricular y no lo potencian como una carta de presentación.


¿Eres de los que ha enviado su currículum a muchas empresas pero no te llaman de ninguna? Quizás has incorporado ciertas frases que no lo potencian.

Es sabido que los reclutadores, debido a la demanda, tienen poco tiempo para filtrar a los candidatos. Por ello, el reto principal de los postulantes es diferenciarse. "Como especialistas en reclutamiento y selección, recomendamos eliminar adjetivos y describir las cualidades por medio de logros" señala Juan Ignacio Silva, executive manager de PageGroup.

A su juicio, los principales errores que cometen quienes postulan a un puesto de trabajo son repetir frases generales que no representan las características particulares.  Para proyectar una mejor imagen curricular, es recomendable describirlas a través de resultados, aclara Silva.

Asimismo, recalca que "el currículum vitae es la carta de presentación del postulante. Éste debe ser capaz de llamar la atención del reclutador. Se tienen sólo 30 segundos para captar positivamente a la empresa", afirma.

Para evitar equivocarte en tu CV, el experto da los siguientes consejos. Revísalos a continuación:

1. Desarrollo profesional

Dentro de las palabras más utilizadas se encuentra "busco desarrollarme profesionalmente en una empresa que..." El objetivo es claro, pero ¿qué es realmente lo que se pretende? Es ideal ocupar frases como "quiero ocupar una gerencia comercial".

2. Liderazgo

Si la persona se describe como formador de líderes y que tiene ejecutivos a su cargo, tiene que probarlo y no solo usarlo como adjetivo. Existen postulantes que describen jefaturas y dan a entender que son líderes. A pesar de que el liderazgo se desarrolla de diferentes maneras, las empresas se basan en resultados para evaluar al candidato.

3. Orientación a resultados

Es recomendable entregar datos concretos. Los reclutadores privilegian este tipo de frases, tales como "alta capacidad de trabajo en equipo", pero solo cuando son expuestas como acciones y se acompañan de resultados. Los postulantes no pasan el primer filtro cuando solo se describen como adjetivos calificativos.

4. Experiencia

Más allá de comentar el número de años, el énfasis debe centrarse en la experiencia por funciones, detallando claramente las responsabilidades y objetivos, además de dar a conocer los logros conseguidos.

5. Negaciones

Palabras como "aunque", "pero" o "sin embargo", que planteen situaciones en negativo, no deben aparecer en los CV. Se recomienda enfocarse en lo que se logró y hablar siempre en positivo.

6. Información familiar

Este tipo de información, además de los pasatiempos, no debe ser expuesta en el currículum, es mejor comentarlos en la entrevista. Sólo se deben dar a conocer los datos de contacto.

Fuente: Diario Pyme

Supera estos miedos para emprender

Una de las decisiones más arriesgadas que puede tomar una persona es iniciar un emprendimiento. Para que tu apuesta sea exitosa, primero debes superar estos siete obstáculos.


Emprender no es fácil. Es una decisión que de seguro te cambiará la vida. Comenzarás a trabajar por tus sueños, y dejarás de hacerlo para los sueños de otro.

Sin embargo, desde la gestación de la idea y hasta su puesta en marcha, te encontrarás con una serie de problemas y temores que podrían estancarte y simplemente hacer que pierdas la confianza.

Aquí te contamos los 7 miedos más comunes a los que se enfrentan los emprendedores. Superarlos depende de ti.

1.- No conseguir financiamiento

Marca la diferencia entre un inversionista y un emprendedor. Son pocos los que toman la decisión de dar el primer paso.

Es muy probable que para comenzar tengas que utilizar tus ahorros o incluso endeudarte.

Por ello, a menos que estés completamente comprometido con tú idea y tú proyecto, evalúa seriamente si estás preparado para dar el paso y comenzar un emprendimiento. Haz el siguiente test para descubrir si tienes pasta de emprendedor.

2.- Fracasar

Un emprendedor debe aprender a convivir todos los días con el fracaso. Dar el salto a la independencia laboral siempre es un riesgo, por lo que debe enfrentarse con madurez y seriedad.

Las cifras parecen lapidarias. De 100% de emprendimientos que surgen en un año, el 98% de ellos fracasa. Tu objetivo es ubicarte en ese 2% que logra superar el primer año de vida.

Pero más importante, tú meta debe incluir no desanimarte y volver a ponerte de pie.

3.- Plagio

Si te pueden robar la idea, es porque tú idea no tiene nada de original y se le puede ocurrir a cualquiera.

Debes replantear la idea. Si continúas con el miedo, tal vez no sirvas para la aventura del emprendimiento. Recuerda, la principal característica de una “idea genial” es que sólo tú sabes cómo llevarla a cabo.

4.- Desconocimiento

Si tienes una idea en mente, debe estar alineada con tus competencias, con lo que sabes hacer, con tus conocimientos. Si te dedicas a la pastelería, tu idea de emprendimiento no puede tratarse de neumáticos para camiones.

Antes de planear un emprendimiento, infórmate. Así disiparás el temor a no tener las herramientas o el conocimiento para desarrollarlo.

5.- Competencia

En todo negocio existe y existirá competencia. Es más, entre mejor le vaya a tu emprendimiento, los rivales serán más y más sofisticados, pero también serán tus mejores aliados.

Un buen competidor te ayudará a mejorar, te presionará para que no te “duermas en los laureles”. Te motivará a buscas nuevos métodos y procesos para hacer más eficiente tu negocio.

En síntesis, da las gracias porque existe competencia.

6.- No vender

Existe una alta probabilidad de que en los inicios de tu emprendimiento, tu producto o servicio no sea demandado, o sea, vendas poco o incluso nada.

Construir una marca, un producto o un servicio que sea cotizado y codiciado por el mercado es un proceso lento, que requiere paciencia y constancia.

Sin embargo, cuando lo consigas, tu producción sólo sabrá de cifras positivas.

7.- Relaciones

Comenzar un emprendimiento está lejos de ser una aventura en solitario. Deberás relacionarte proveedores, competidores, patrocinadores, socios y los clientes.

Aliméntate de todo lo que puedas captar de ellos. Serán tu fuente de información y contactos.

Valora el feedback que recibas de cada uno de ellos, considéralo parte de tus activos.

Fuente: Inversor Gobal

Tips para sobrevivir a las primeras semanas en un nuevo trabajo

Ya sea tu primer trabajo o el quinto, las primeras semanas en un nuevo empleo son siempre difíciles. Además de tener que acostumbrarte a un nuevo equipo y a un nuevo jefe, debes digerir una gran cantidad de información.


Pasar por un proceso de selección ya es difícil y muchos se relajan una vez que logran firmar un contrato, pensando: “¡Se acabó lo más difícil!”Pero ahora viene la segunda parte: adaptarse al nuevo empleo.

Un nuevo trabajo, puede ser una experiencia intensa, porque aparte de todo lo que te falta por aprender, hay una innegable presión por hacer bien lo que te piden.

Es por eso que elaboramos una lista con 3 consejos que podrían ayudarte si es que te encuentras sobrepasado por tu nuevo trabajo.

1. El sentimiento de incomodidad es algo bueno

Es normal sentir que no tienes idea de lo que estás haciendo cuando empiezas un nuevo trabajo. Nada es familiar y como hay mucho que aprender, las tareas se acumulan. Si sientes que odias tu nuevo empleo y tienes ganas de renunciar,  primero pregúntate qué es lo que tanto te desagrada. 

Según el coach Steve Errey “la incomodidad significa que estás explorando. Significa que estás en un lugar en donde no habías estado nunca, a lo mejor estás aprendiendo nuevas habilidades que te hacen sentir torpe e incompetente”.

Si crees que estás creciendo más en este nuevo trabajo que en tu empleo anterior y la incomodidad que sientes se debe a que estás enfrentándote a un nuevo desafío, entonces vas por buen camino.

2. Está bien aceptar ayuda

Así de simple: si te ofrecen ayuda, acéptala. Pero siempre es bueno intentar hacer las cosas por tu cuenta primero. Es probable que otra persona dentro de la empresa haya hecho lo que tú haces ahora y aceptar ayuda no te convierte automáticamente en alguien que no sabe cómo lidiar con su nuevo trabajo.

Es tentador querer probar que lo puedes hacer todo solo. Pero mientras más ayuda tengas, más rápido te adecuarás a tu nuevo puesto de trabajo. No dejes que tu orgullo te impida hacer bien tu trabajo.

3. Tranquilo, que ya se te hará más fácil

Si has sufrido con un nuevo trabajo, es posible que te hayas preguntado muchas veces: “¿Será muy pronto para renunciar?” Y probablemente en el 99% de los casos la respuesta a esa pregunta sea un “Sí”.

Siempre los primeros días, o incluso semanas, serán difíciles. La inseguridad, la desconfianza en nuestras habilidades, la incomodidad para hablar en las reuniones y no saber cómo tratar con tu jefe, son algunas de las dificultades más comunes al empezar en un nuevo trabajo.

Es posible que los días se te hagan eternos tratando de adaptarte a tu nueva rutina y que cada vez que te llegue un correo te pongas nervioso. Pero con el tiempo se te hará más fácil. Justo como fue con tu trabajo anterior y el anterior a ese. 

Conocerás los procesos, sabrás lo que esperan de ti y te sentirás con más confianza. Por supuesto, no debes nunca sentirte tan a gusto que dejes de crecer (ver punto 1) pero es importante que sepas que no te sentirás así de perdido para siempre.

Fuente: Reqlut

6 errores comunes en el perfil de LinkedIn

Una de las herramientas más empleadas para la búsqueda trabajo es LinkedIn y los empleadores y reclutadores utilizan esta red para encontrar y descartar candidatos, así que son expertos en detectar la información falsa y las inconsistencias en los datos.


En los últimos años la proliferación de Internet y en concreto de las redes sociales ha propiciado que el perfil profesional sea visible y accesible para muchas personas a través de múltiples canales, como Reqlut.com. Por ello, mostraremos los seis errores más comunes en LinkedIn que tienes que evitar a toda costa, si estás buscando un nuevo trabajo:

1. Darte una promoción retrospectiva

Puede ser tentador ir atrás en el tiempo para darse promoción. Es posible que te hayas encargado de la gestión de una amplia gama de tareas mientras trabajabas como asistente de contador, pero esto no te hace un contador. Los reclutadores saben cuando algo simplemente no cuadra y te verán como deshonesto. Elevar el título de “Gerente de Finanzas” a “Director Financiero” porque trabajaste en una pequeña empresa y eras la persona de finanzas de más alto rango podría poner tu credibilidad en riesgo innecesariamente. Una pequeña mentira aquí o allá en tu perfil de LinkedIn es posible que provoque una reducción de las posibilidades de preselección o incluso si pasas la preselección, la entrevista de trabajo puede enfocarse directamente a probar tu historial de trabajo en detalle.

2. No tomes crédito por el trabajo de otros

Lo bueno de tener un perfil de LinkedIn es que resulta muy accesible, pero esto también significa que cualquier declaración o comentario que hagas puede ser visto por mucha gente, incluidos los compañeros de trabajo y antiguos colegas. Las responsabilidades describen a un posible empleador acerca de tu puesto de trabajo, mientras que los logros cuentan sobre tu desempeño en el trabajo, y por lo tanto deben ser exhibidos en tu perfil de LinkedIn, no obstante, asegúrate de que realmente son tus logros. Promocionar un éxito que pertenece a otra persona es deshonesto y sólo dañará tu reputación a largo plazo.

3. Documenta tu historial de trabajo en una línea de tiempo

Dónde trabajaste, exactamente cuándo y por cuánto tiempo son elementos clave para cualquier empleador potencial. No falsifiques fechas ni trates de llenar los vacíos con experiencia laboral falsa en tu perfil de LinkedIn ni en ninguna parte que sea accesible para un reclutador. Además, asegúrate de que cualquier información que se publique en tu perfil en línea sea consistente con lo que describes en tu Currículum Vitae. Las inconsistencias son una señal de alerta para los candidatos.

4. Cantidad no es calidad

Aunque es tentador tratar de conectarte con tantas personas como sea posible, la verdadera fuerza de tener un perfil de LinkedIn radica en conectar a las personas de tu industria, profesión o sector. Aceptar cada invitación debilita la calidad de tu red. Siempre revisa el perfil de la persona que desea conectarse contigo para asegurar que sea relevante para tu red.

5. Incluye una imagen que sea real

Nadie te puede obligar a tener una foto ni en tu perfil de LinkedIn ni en tu curriculum vitae, pero si decides tenerla, asegúrate de incluir una fotografía profesional que abarque de cabeza hasta los hombros – preferiblemente sonriendo. Evita editar la foto si tu objetivo es que te reconozcan en las entrevistas de trabajo. Evita también las fotos recortadas de bodas o de tus vacaciones.

6. Recomendaciones verdaderas

Las recomendaciones de LinkedIn funcionan mejor cuando son auténticas y las proporcionan los gerentes, clientes y otras personas que les hayas brindado un excelente servicio. Las recomendaciones por parte de compañeros y amigos en tu perfil de LinkedIn no son una forma creíble para construirte tu marca personal.

Fuente: Reqlut

¿Cobras por lo que haces o cobras por lo que sabes?


Estoy seguro que estás pensando que es una pregunta de gran actualidad. Si has oído hablar que estamos en la era de la información, ya hace varios años y gracias a la increíble revolución que significó Internet, sospecharás cuál es la perspectiva que me gustaría que tomaras para responder a esta pregunta.
Si bien todavía hay profesiones muy puntuales que requieren de conocimientos y habilidades muy específicos por los cuales necesitamos que “hagan por nosotros”, hoy hay millones de personas en todo el mundo que viven de lo que sus conocimientos pueden proveer a sus clientes. ¿Es tu caso? ¿O todavía cobras por lo que haces?
La globalización, el exceso de información, la internacionalización de los mercados,  hicieron que algunas tareas queden relegadas, un poco devaluadas y se conviertan en commodities (si no sabes de qué se trata, te cuento que es un término en inglés que solía darse a las mercancías de consumos, especialmente granos – porque uno no se diferencia de otro, excepto en el precio – y en su versión más general se trata de productos (o servicios, como te estoy contando) genéricos, básicos y sin mayor diferenciación.
Pero no tiene por qué ser así en tu caso. Tú puedes reinventar tu profesión y convertirte en un profesional del conocimiento. Es cierto, no es una tarea sencilla, no voy a mentirte, y tampoco lo harás en un abrir y cerrar de ojos. Pero a lo mejor te das cuenta que vale la pena y puedes comenzar en el camino con este primer paso: redescubriendo lo valioso que es tu conocimiento (lo que sabes, tu experiencia, lo que puedes ayudar a otros a lograr). Pero si todavía no te decides, entonces es un buen momento para que yo comparta contigo:

3 desventajas de cobrar por lo que haces (en vez de cobrar por lo que sabes)

Desventaja N°1 – Más dependencia de tus horas de trabajo
En primer lugar, eres más dependiente de tu tiempo y tu dedicación en el negocio. Es el típico ejemplo de “si no estás ahí, no ganas dinero”. Y claro, es lógico, si no estás “trabajando” las cosas no se están “haciendo”.
Además, hay una trampita muy desagradable con la que muchos profesionales que cobran por lo que hacen se encuentran frecuentemente: el típico “¿Cómo me cobras X dinero si sólo has trabajado 5 minutos?” Y es que esto sucede frecuentemente porque tus clientes asocian el valor de tus servicios o tus honorarios, al tiempo que le dedicas a resolver tal problema. Es natural y “se les escapa” el concepto de formación, tu entrenamiento, tu “prueba y error” en secreto y en silencio con el que has luchado en tus comienzos, la experiencia que has adquirido año tras año, tu propio aprendizaje y evolución, lo que te esfuerzas por mejorar cada día y eso implica hacer más rápido.  Ese es el primer problema de cobrar por lo que haces. Todo lo demás queda en las sombras y tu cliente no lo reconoce.
Desventaja N°2 – No hay un valor transformacional y por ende es difícil mostrar un valor agregado
Si tú haces el trabajo por ellos, es más probable que tus clientes no se transformen en el proceso. Si no hay un poder transformacional (si no han aprendido nada, si no han cambiado y mejorado, si no lograron más que antes) entonces corres el riesgo de ser “uno más” de sus posibles proveedores.
Es natural, tus clientes no pueden ver y apreciar el valor de lo que haces, porque no lo ven y sobre todo porque no lo viven. No me malinterpretes, para ellos es más sencillo que tú lo hagas, de eso no hay duda. Pero si no tienes un valor agregado adicional, es muy difícil que compitas por algo más que el precio en el mercado. Y si compites por precio (por tus tarifas) dejas de ser un profesional y te conviertes en un número. De ahí en adelante ese número es lo único que tus clientes verán por más esfuerzo que pongas en tu trabajo.
Desventaja N°3 – Tarifas más competitivas
No hay nada de malo en tener tarifas más competitivas, excepto que quieras ser un profesional de alto nivel. Si quieres ser un profesional de excelencia  y alto nivel, tus tarifas deben ser altas. No estoy hablando de subir tus tarifas porque sí, estoy hablando de tener altas tarifas porque el servicio que ofreces es de alto nivel también.
Ahora bien, ¿qué es lo que hace que tus servicios sean de alto nivel y así puedas tener altas tarifas? En primer lugar, resultados. Si un cliente no obtiene contigo lo que espera (y hasta te diría un poco más de lo que sus expectativas iniciales setearon) no eres un profesional de alto nivel. En segundo lugar, un aprendizaje que puedan replicar. Te doy un ejemplo sencillo: lo que mis clientes aprenden hoy conmigo y aplican para crear su práctica profesional exitosa, lo pueden volver a aplicar en algunos años si deciden abrir una nueva práctica profesional. Mientras que el conocimiento (las estrategias, los modelos, las tareas funcionales) no se vuelva obsoleto, es absolutamente replicable. Así que su inversión no sólo se repaga con sus primeros clientes, sino que pueden obtener rédito de ella una y otra vez. Algo que sería bastante difícil si yo hiciera el trabajo por ellos. ¿Lo ves?
¿Reflexionamos?
Imagino que si es la primera vez que te encuentras con esta información y este punto de vista, te puede resultar un poco complicado de asimilar. O a lo mejor no, te has dado cuenta que tiene mucho sentido y te sientes identificado con lo que pasa a tu alrededor. En cualquier caso, no importa al ritmo que sopeses estas oportunidades, pero es importante que lo hagas. Pregúntate, piensa y reflexiona:
¿En qué área eres un experto y podrías ayudar a otros a lograr lo que solos no podrían alcanzar?
¿Qué conocimientos tienes por los que otros estarían dispuestos a pagar por recibir o aplicar en su vida?
Respóndete estas preguntas y seguro encontrarás un conocimiento que puede ayudarte a tener un negocio y una práctica profesional en un mundo donde las reglas han cambiado y donde tú puedes tomar la delantera de tu propia carrera profesional.
¿Qué opinas de este artículo? ¿Tú todavía cobras por lo que haces o cobras por lo que sabes? ¿Esta reflexión te ha hecho pensar en algo diferente y quieres reinventar tu profesión? Comparte conmigo tu opinión en la caja de comentarios que tienes al final de esta página!
Fuente: Emprendices

Mientras más hablas en el trabajo más productivo eres

Ésa es la conclusión a la que llegó un grupo de ex alumnos del MIT luego de crear una startup para medir los niveles de comunicación entre los miembros de diferentes empresas.


Recientemente Chile se ha ubicado como uno de los países más trabajólicos de la OCDE. Sin embargo, la productividad no necesariamente va de la mano de las horas trabajadas. Así lo demuestra un artículo publicado en el diario El País de España, el que analiza la experiencia de Humanyze, empresa desarrollada por ex estudiantes del Massachusetts Institute of Technology (MIT), que se dedica a medir las interacciones de los trabajadores.

Para Humanyze detectar cada uno de los movimientos de los trabajadores es clave para realizar su análisis, por lo que a través de un pequeño sensor que cuelga del cuello de los trabajadores en forma de tarjeta pueden captar "cuántas veces se levantan de su sitio, qué tono utilizan al hablar por teléfono con los clientes o cómo se relacionan con sus colegas".

De acuerdo a lo experimentado, Humanyze, llegó a la conclusión de que quienes hablaban más en los descansos eran más productivos. El proyecto, que ya ha probado el sistema en 12 empresas norteamericanas, dice que, por ejemplo, los empleados que almorzaban en grupos grandes resolvían su trabajo en menos tiempo, ya que aprovechaban ese tiempo precisamente para compartir con sus compañeros los problemas que tenían en el trabajo.

"Ya existía mucha literatura científica sobre la vinculación entre las relaciones sociales y la productividad, pero se basaban en encuestas. Nosotros hemos demostrado con datos y métricas reales que estas teorías eran ciertas", indica al Diario El País Daniel Olguín, cofundador de Humanyze y quien fuera el encargado de diseñar los primeros hardware de la empresa.

Por ejemplo Bank of America, uno de los clientes que acudió a ellos para analizar por qué algunos de sus call centers funcionaban mejor que otros descubrió que aquellos empleados que interactuaban con otros completaban sus llamadas en la mitad del tiempo.

Fuente: Diario Pyme

¿Cómo gestionar y retener al Talento Humano según su generación? (En especial la Generación Y)


La vida laboral de toda persona transcurre desde muy joven y se va escalando a medida que avanza el tiempo, actualmente la Generación Y o Millenials están llegando a las gerencias de las empresas, personalmente, soy de los primero nacidos en ésta generación y actualmente ocupo mi tercer cargo gerencial, y veo cómo se acercan muchos más jóvenes a puestos clave en las organizaciones, somos tildados como una generación con problemas en el trabajo, que generamos alta rotación y hasta se nos llama inestables, pero la verdad es que cada generación tiene particularidades que la hacen diferente a las demás y sus motivadores para permanecer en una organización también son diferentes, veamos cómo son cada una de las generaciones que conviven actualmente en las empresas y cómo retenerlos, en orden cronológico y veremos cómo con cada generación se hace más complicado gestionar el Talento Humano.
La Generación de los Baby Boomers
A través de la historia, una de las generaciones más mercadeadas de todas, aunque el mundo entero se identifica con la generación para quienes nacieron entre 1944 y 1960 lo cierto es que el término aplica únicamente para Estados Unidos y los países anglosajones donde la natalidad creció tanto generando este término, según la empresa Baby Boomers Latinos ésta generación aporta a la población de Estados Unidos 78 millones de personas, pero en el caso de América Latina la cifra para todos es alrededor de 56 millones, muchos de ellos quizás ya estén jubilados pero en todas las organizaciones aún encontramos a varios compañeros de trabajo que pertenecen a ésta generación.
¿Cómo son los Baby Boomers y cómo retenerlos como Talento Humano?
Son muy optimistas y la mayoría de personas mayores que te reciben en el trabajo con una sonrisa, muy comprometidos y adictos al trabajo, para retenerlos es necesario crear un ambiente de trabajo estable y tranquilo, les gusta que los premien así que hay que premiar su trabajo y darles el reconocimiento adecuado, son motivados por incentivos que dan estatus, como viajes al extranjero y reconocimientos por trayectoria. Retenerlos se podrá hasta que decidan jubilarse o retirarse.
La Generación X
Esta generación si es más universal, es la generación nacida entre 1960 y 1980, crecieron bajo un periodo de muchos cambios y escepticismo por la política, nuevas enfermedades y crisis financieras, acompañados del alza del consumismo, en Estados Unidos son considerados una generación pequeña, pero en América Latina es más grande, incluso en España es durante ésta generación que tienen su propio Baby Boom, personalmente considero que tenemos más compañeros de ésta generación en las empresas
¿Cómo es la Generación X y cómo retenerlos como Talento Humano?
Es una de las más agradables fuerzas de trabajo que hay en las organizaciones, pese a ser escépticos en todo y que cuestionan hasta el más mínimo detalle, son sin lugar a dudas gente que creció bajo una educación que conoció la disciplina y un esquema de estructura y dirección, lo que hace que reconozcan el liderazgo y orden jerárquico dentro de las empresas, al mismo tiempo según Don Hellriegel en su libro Psicología Social son los primeros en hacer un equilibrio entre su trabajo y su vida personal, la cual tiene un gran valor para ellos, para retenerlos hay que alimentar sus objetivos y deseos en base a su vida personal, los incentivos deben hacerse en función de ello, si lo que aspiran es un viaje para las vacaciones se lo pueden ganar alcanzando ciertos objetivos, permitirles viajar eventualmente en primera clase como un bono o pagarles un curso adicional de algo que no será de utilidad para la empresa, como un curso de pintura por ejemplo pero que los motivará porque es algo que le gusta y mejora su vida personal, la forma de ganarse su lealtad es desarrollando seguridad en su carrera, es muy importante tener un claro Plan de Carrera y un Desarrollo de Personal que garantice dicha seguridad, pues ésta generación ha visto cómo la fuerza laboral es desplazada por máquinas y robots en el ámbito operativo, como lo mencionan Wayne Mondy y Robert Noe en su libroAdministración de Recursos Humanos.
La Generación Y
“Ahhh la Generación Y”, para muchos profesionales de Recursos Humanos un verdadero dolor de cabeza, los responsables de los altos índices de rotación y considerados por muchos una fuerza laboral inestable, que nació con la tecnología bajo el brazo pero pierden el interés fácilmente por sus trabajos, padecen falta de compromiso, y para quienes piensan de esa manera ven un escenario lleno de nubes negras que se avecina, muchos están ocupando ya los cargos gerenciales de las empresas.
La Generación Y, nacidos desde 1981 hasta la fecha, llamados también Millenials y que incluyen a la Generación I como llamó Bill Gates a los nacidos después de 1994 como la Generación Internet, son una generación incomprendida, que necesita lo último en tecnología y motivadores que para muchos son ridículos, como por ejemplo tiempo libre, como lo mencionan Gary Chapman y Paul White en su libro Los 5 Lenguajes del aprecio en el trabajo: Cómo motivar al personal para mejorar su empresa.Pero… ¿Realmente son un problema o un equipo de Talento Humano mal administrado?
¿Cómo es la Generación Y o Millenials y cómo retenerlos como Talento Humano?
¡NO LOS RETENGAS! A la Generación Y hay que Fidelizarla (dicho sea de paso una palabra muy de moda últimamente), contrario  a lo que se piensa que no son fieles y cambian de puestos como cambiarse de ropa, hay que entender que sus necesidades de cambio son por nuevos retos que se les debe imponer y hacer su experiencia laboral algo que les de nuevos conocimientos y desarrollo como personas, lograrlo los motiva a permanecer en una empresa donde encuentran lo que quieren y permanecerán en ella por el reto que representa para ellos diariamente, si creen en esa empresa y se hacen sus “FANS”, serán sus colaboradores fieles y permanecerán en las empresas. Según el libro de Mondy y Noe, ésta generación promete ser la más rica, inteligente y conocedora que haya existido, tienen varios nombres como generación, provocando una falta de identidad pero la razón es que viven en tiempos de constante cambio, y así se han generados varios nombres en tiempos más cortos que como lo hacían antes, sus características y expectativas según Ken Dytchwald, autor del libroRetención del Talento, son las siguientes (y en paréntesis nuestra recomendación):
  • Responsabilidad individual y libertad para tomar decisiones (Concederles Empowerment)
  • Entorno de trabajo agradable que fomente las relaciones sociales (internas y externas en la organización, no hablamos solo de redes sociales ni están pidiendo tener acceso libre al Facebook, sino una mejor interacción con las personas)
  • Oportunidades de aprendizaje y crecimiento (Desarrollo del Talento y crecimiento claro a través de su Plan de Carrera y Capacitaciones, están en búsqueda constante de información y nuevos conocimientos)
  • Colaboración y toma de decisiones en grupo (Saben trabajar en equipo y hacerse especialistas en un tema, algo muy positivo que otras generaciones no tienen pues pierden la seguridad que buscan en sus empleos)
  • Realimentación continua (Feedback) y revisiones de rendimiento (No les gusta que los administren ni vigilen, pero sí que reconozcan sus logros y sean visibles, así que la mejor forma de administrarlos es por objetivos y verificar si los cumple o no facilitando la tarea administrativa de Supervisión)
  • Retribución por resultados (Crecieron con videojuegos y la aplicación de la “gamificación” responde a este punto, hay resultados por logros como alcanzar un nivel o superar una prueba y por consiguiente una retribución, así que deben tener objetivos de corto plazo para mantenerse interesados y los objetivos a largo plazo estar alineados a sus metas personales)
  • Flexibilidad temporal y espacial (Quizás lleguemos algún día a manejar el teletrabajo y horas del día sin restricciones, solo por resultados y convivir en espacios como el famoso Campus Google, algo que choca de frente con nuestras culturas organizacionales, pero si los resultados se logran, algunas flexibilidades pueden ser premios que pueden usar, por ejemplo sumar una hora al almuerzo para que asistan a un gimnasio).
Una de las industrias que me gusta poner como ejemplo en la gestión de la Generación Y es la del Contact Center o Call Center, que actualmente tienen la infraestructura para proveer espacios de trabajo, esparcimiento (juegos , cafeterías, salas de descanso), gimnasios y hasta universidades dentro de las instalaciones, como una ciudad, donde trabajan, viven y conviven, tienen flexibilidad de horarios, tiempos de descanso y sus tareas son una de las más difíciles y complicadas de las organizaciones, Servicio al Cliente, especialmente reclamos, un área donde es muy difícil motivar a alguien por la naturaleza de su trabajo, pero esta generación está comprometida con la empresa, y son fieles a ella haciéndola parte de su estilo de vida.
Al hacer un inventario de tu personal ¿Qué porcentajes son de cada generación? y ¿Cómo se debería administrar tu Talento Humano?

Fuente: 5Consultores

Cómo aprovechar el tiempo durante un período de cesantía

Hay que mantener una rutina diaria que incluya la búsqueda de trabajo y reorganizar las finanzas. Expertos entregan una serie de consejos.



Entre los acontecimientos más estresantes de la vida está la muerte de un familiar directo, la separación o divorcio de una pareja, y luego perder el trabajo. Así lo afirma a La Hora Andrés Fraudenberg, experto en capital humano de la facultad de Emprendimientos y Negocios de la Universidad Mayor.

"La cesantía es un período emocionalmente complicado para las personas", señala.

En Chile, el 69% de los trabajadores tardó menos de cuatro meses en encontrar su último empleo, según un estudio de Adecco, empresa de recursos humanos.

Pero hay otros que pueden pasar un largo tiempo desempleados. De hecho, el 13% tardó entre cuatro y siete meses en obtener trabajo, el 5% entre siete y diez, y otro 13% se tardó más de diez.

Los expertos recomiendan agotar todas las posibilidades para encontrar un nuevo empleo, como recurrir a la red de contactos, portales, compañías de reclutamiento y páginas web de empresas de interés, entre otros.

Pero también es importante saber cómo sobrellevar esta etapa sicológicamente. Para eso Fraudenberg y Sebastián Valenzuela, sicólogo de la ACHS, entregan algunos consejos:

PLANIFICACIÓN

1.- Hay que planificarse bien durante el período de cesantía. Crear una agenda con actividades diarias para no perder una rutina y también aprovechar de hacer lo que antes no se podía.

2.- Se debe hacer un plan de finanzas personales. Dejar de darse lujos, eliminar gastos innecesarios y tener claro el presupuesto para no caer en la angustia de encontrarse sin dinero.

3.- Buscar trabajo toma varias horas al día. La fórmula más efectiva para encontrarlo es acudir a las redes de contacto y para eso hay que darse el tiempo de juntarse con conocidos y contar la situación.

4.- El apoyo social es fundamental. No encontrar trabajo frustra mucho y esto te desconecta de los cercanos. Hay que mantenerse en contacto con otras personas para no decaer.

5.- También hay que descubrir los talentos y fortalezas que no se sabían que se tenían, para así abrirse a otros trabajos que no se tenían pensados. No hay que encerrarse en uno solo.

6.- Nunca hay que darse por vencido. Si uno deja de buscar, baja la actividad y aumenta la fustración. "Mientras mas cupones mandes, más posibilidades tienes de ganar", se suele decir.

Fuente: Diario La Hora

Las mentiras más comunes del curriculum vitae

Muchas personas optan por “adornar” el curriculum vitae como si fuese el CV del CEO de Google. Las mentiras en tu curriculum vitae sobre tu experiencia laboral o cualquiera de tus capacidades, en lugar de ir a tu favor, puede jugar en tu contra.



Para los encargados de recursos humanos que son más experimentados, encontrar esos datos falsos en el curriculum vitae es muy fácil. Además, tan solo hace falta una llamada a un colega para poder despejar la duda.

Cuando una empresa descubre mentiras en el curriculum vitae, el candidato es desechado automáticamente, no solo para ese proceso, sino que para cualquiera que se pueda dar en el futuro.

¿Cuáles son las mentiras más típicas en el curriculum vitae? Aquí en Reqlut.com te contamos:

1. Los idiomas

Muchos decimos tener nivel “medio” o “medio-alto” cuando nos preguntan si sabemos hablar inglés. El problema aparece cuando tenemos que justificar el nivel que decimos tener en el curriculum vitae con un título, o si debemos enfrentarnos a una conversación en inglés. 

2. Habilidades informáticas

De una manera semejante a lo que ocurre con el inglés, muchos tienden a rellenar la sección de aptitudes del curriculum vitae con restos extraídos de su experiencia de usuario con el computador.
Lamentablemente, saber recortar una fotografía en Photoshop no es lo mismo que saber ilustración, y ser capaces de redactar un texto y guardarlo no nos convierte en escritores, y eso se verá al instante si nos someten a una prueba.

3. Exagerar nuestras funciones

El lenguaje permite una ambigüedad que favorece el brillo de nuestra experiencia laboral en el curriculum vitae. Además, es muy difícil que el entrevistador llegue a conocer con exactitud cada una de nuestras funciones en otros empleos. Por eso, muchos se sienten inclinados a escribir con cierta manga ancha en la descripción de los empleos del curriculum vitae. Ojo con usar “gestión de equipos”, cuando hemos trabajado codo a codo con un grupo de dos personas o “diseño de imagen” por señalar cuál es el color que mejor le queda a la página de la empresa.

4. Eliminar pasados empleos

 Este punto es discutible, ya que quizá no sea relevante mencionar en nuestro curriculum vitae ese empleo de mesero que tuvimos a los 20 para pagarnos los gastos personales. Lo que no está bien es intentar ocultar un empleo por el fracaso de un proyecto o una salida inapropiada de la empresa, por miedo de que se puedan pedir referencias a dicha firma.

5. Nivel de estudios

Scott Thompson, ex director ejecutivo de Yahoo, mintió sobre esto y perdió su trabajo. A diferencia de otro tipo de conocimientos, la posesión de un título es fácilmente comprobable, por lo que es inútil decir en el curriculum vitae que hemos terminado una carrera cuando no completamos todos los créditos o si nunca entregamos la tesis.

6. Experiencia laboral

Cuantos más trabajos presentemos en el curriculum vitae, menos probabilidades hay de que el seleccionador levante el teléfono para buscar referencias. Por eso, muchos candidatos cargan la lista, pero cuidado con exagerar, porque un par de líneas pueden echar por tierra una candidatura perfecta. El mejor consejo es seleccionar todo lo relevante para el cargo.

7. Utilizar el “autoempleo” para camuflar los períodos de cesantía

 Uno de los principales temores de los candidatos cuando confeccionan su curriculum vitae, es esa colección de vacíos entre trabajo y trabajo. Pero la solución no está en presentar el documento con cada extraño trabajo que hayamos hecho y donde la labor que desempeñamos es muy difícil de comprobar.

8. Empresas en las que nunca se ha trabajado

 Puede parecer loco, pero pasa. Hay candidatos que inventan trabajos en su curriculum vitae. En ocasiones, en empresas ficticias que supuestamente ya no existen, por lo que será imposible seguir sus huellas.

Fuente: Reqlut