Aproximadamente un 40% de los chilenos experimenta sensaciones de tristeza y desasosiego al retornar de sus vacaciones. En esta nota te contamos qué es el estrés postvacacional y cómo combatirlo para hacer la transición más amena.
Sin importar cuanto te guste y disfrutes de hacer tu trabajo, siempre llegará el momento en el que necesites alejarte de tus obligaciones para pasar tiempo con tus seres queridos, disfrutar de la playa, salir de carrete, etc. Las vacaciones son, sin lugar a dudas, el momento más anhelado del año para cualquier trabajador pero, ¿qué ocurre cuando se terminan?
Si bien muchos logran readaptarse a la rutina laboral sin mayores inconvenientes, se estima que cerca de un 40% de los chilenos experimenta sensaciones de tristeza y desasosiego una vez que culmina este afable período de descanso. A este fenómeno se le conoce como “estrés posvacacional”, y se manifiesta a través de síntomas como insomnio dolores de cabeza, alteraciones del apetito, desmotivación, irritabilidad, dificultades para concentrase, ansiedad e incluso, en algunos casos, depresión.
¿Por qué se produce?
La readaptación a la vida laboral después de las vacaciones incluye cambios de horario, de alimentación, menos horas de sueño, retomar las obligaciones y la carga emocional que implica la vida social en la oficina, etc. Todo ello conforma un proceso normal de adaptación, sólo que en algunos casos puede llegar a ser más intenso y producir en quienes lo sufren este tipo de molestias psicológicas y/o física.
Cómo combatirlo
Si sientes que el estrés postvacacional se está apoderando de ti, no te preocupes. A continuación te presentamos algunos consejos sencillos para que puedas combatirlo y volver a ser tú mismo en el trabajo.
1. No regreses a la rutina de golpe. No cometas el error de regresar de tus vacaciones un domingo de noche cuando debes retomar tus labores el lunes de mañana. Tómate al menos un par de días para reorganizar tu mente antes de lanzarte de nuevo a la vorágine del trabajo.
2. Reorganiza tus tareas. Dedica un tiempo a priorizar las tareas más urgentes, procurando siempre comenzar por las más sencillas y placenteras. También es importante que reorganices tu agenda con tranquilidad para no sobrecargarte los primeros días.
3. Respeta las horas de sueño. Una de las principales causas del estrés vocacional son las alteraciones del sueño que se producen al pasar de un período de descanso a un período productivo. Las vacaciones son sinónimo de dormir muchas horas algunos días y trasnochar varias noches, por lo que cuando regreses al trabajo es fundamental que regularices tus horas de sueño.
4. Modera el consumo de alcohol y cafeína. Está comprobado que el alcohol es un depresor del sistema nervioso central que puede agravar los síntomas de apatía y depresión. Por otra parte, el café y las bebidas con cafeína suelen agudizar los síntomas de estrés y la ansiedad.
5. Practica algún deporte. Las endorfinas que liberarás a través de la práctica de algún deporte o actividad física te ayudarán a pasar este período más rápidamente. Además, al concentrarte en este tipo de actividades liberarás tensiones y te olvidarás de los problemas de la oficina por un rato.
Fuente: Universia
