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10 Claves para el éxito

Los 10 mandamientos para convertir una idea en un negocio con muchas posibilidades de éxito.



Lo que a continuación pretendemos explicar facilitará el desarrollo de tu idea, aumentando de manera considerable el éxito de tu negocio, no obstante la mejor manera de medir el posible éxito de tu idea es escribir en un cuaderno sus bases e ir a venderla, solo así sabrás si es un idea con potencial o no, si se vende tendrás que apurar toda su construcción, de lo contrario, no habrás invertido demasiado tiempo y esfuerzos.
  1. Hacer lo que te apasiona: es fundamental tener una idea clara a la hora de pensar en emprender un negocio, no es necesario que este desarrollada a cabalidad, pero sí que sea un tema que te motive, esto se basa en lo siguiente: cuando uno piensa en emprender, lo que hace es dejar de trabajar 8 horas para alguien más, pero a cambio debes trabajar aproximadamente 16 horas al día, a veces incluso más, para que tu idea surja. Con lo anterior se hace más evidente el porque debe ser un tema que te apasione, ya que serán muchas horas y noches de desvelo con el fin de hacer crecer tu idea. 
  1. Seguir tu intuición: cuando algo nos apasiona podemos dedicar un sin fin de horas a ese tema, por ende el conocimiento que se tiene es muy amplio, aunque no siempre tan especifico como se pretendería, esto nos abre nuevas puertas que nos invitan a imaginar y proyectar cosas que cuando las pensamos son locuras, por lo mismo cometemos el error de preguntar a personas que aunque pueden tener experiencia en varios temas, no comparten la misma pasión, por lo que dejan de ser un ente valido para evaluar a cabalidad nuestra idea. Nadie más que tu puede ver el potencial de tu idea y es aquí donde debes seguir tu intuición, cuantos negocios exitosos y millonarios nacieron de locuras de sus creadores, siempre es mejor haberlo hecho que arrepentirte de no hacerlo.
  1. Investigar, observar, aprender: nunca se deja de aprender, por más basto que podamos creer que es nuestro conocimiento de un área, siempre se podrá aprender cosas nuevas, no obstante, una empresa requiere más que solo el área principal de negocio. Por lo general, las empresas requieren áreas de publicidad, diseño, contabilidad, ventas entre otros, incluso cuando es solo 1 persona se deben llevar a cabo estas tareas, por esto es importante investigar cómo funcionan o desarrollan otras empresas esas funciones, observar a tu competencia, aprender de lo bueno y de sur errores, siempre es recomendable asesorarte con expertos, pero no siempre esta esa opción.
  1. Fichar a los mejores: cuando tienes la posibilidad de contratar expertos para tu proyecto, es fundamental que sean los mejores en su área. Siempre será un plus tener alguien que sea 100% comprometido con su área, porque eso a la larga lo convertirá en uno de los mejores, esto además de facilitar tu trabajo en esa área, te entrega visiones diferentes a las tuyas pero que siempre pueden ayudar a crecer más rápido y de mejor forma.
  1. Arriesgar por tu idea: emprender siempre es un riesgo, ya que no tenemos certeza de que pasara, de si habrán o no ganancias en dinero. Además, existen otros riesgos, como puede ser el tipo de estrategias o campañas a realizar en la promoción de tu negocio, encontramos también los proyectos concursables o gestionar un proyecto no solicitado, pero que cubre y mejora las necesidades de una empresa. Cuando se decide hacer esto, tienes que dedicarle un 100% de esfuerzo y convicción en que resultará, de “fracazar”, te darás cuenta que el tiempo invertido no fue para nada perdido, se aprende mucho y la experiencia obtenida, tanto como el material desarrollado para ese proyecto, puede interesarle a otra empresa.
  1. Seducir a tus socios y trabajadores: esto plantea lo siguiente, así como uno está enamorado de su idea, como para dedicarle 15 o más horas al día, acostarse pensando en que cosas hacer, como mejorar, etc. Es lo que debemos conseguir que sientan nuestros socios y trabajadores, que se comprometan como tú lo estas con el proyecto, así es la única forma de conseguir buenos resultados en menos tiempo, ya que de lo contrario tú eres el único con una mochila el doble de grande, mientras ellos caminan tú intentas correr desgastándote solo por el mismo camino, sin conseguir los resultados que buscas.
  1. Mantener una carga de trabajo reducida: siempre hay algo que hacer en la empresa, pero es mejor ir resolviendo partes pequeñas que entregen un buen resultado, que plantear ese gran problema sin saber a dónde se llegará en el proceso. Es importante tener una planificación constante en búsqueda de los objetivos trazados para el mes, semestre e incluso el año. Lo importante es tener objetivos trazados que sean medibles en el tiempo, sin importar que quizá no se cumplan o no se llegue a la meta, lo importante es construir un plan de trabajo que se pueda afinar cada vez más, es fundamental generar instancias de reunión con las diversas áreas y escuchar a cada parte de la empresa, ya que ellos nos pueden brindar la retro alimentación necesaria para mejorar la gestión de la empresa.
  1. La calidad como religión: a medida que vamos trabajando con diversos clientes, nos damos cuenta que cada proyecto es diferente, en cuanto al contenido, área de trabajo, etc. Así como también la dificultad y precio del proyecto varían en relación a las necesidades de cada cliente. Lo que debemos aprender, y mientras antes se haga mejor, es que la calidad de tu trabajo no puede cambiar independiente de la envergadura del proyecto, la dedicación por lo que haces no se puede medir en dinero, siempre tu esfuerzo debe ser el mayor posible. Te has preguntado alguna vez ¿como se mide la calidad de tu trabajo?… la calidad y confiabilidad de tu trabajo se mide de 2 formas, cuando un cliente te recomienda a otro, o cuando vuelve a contratarte, es por esto que siempre es importante entregar la mejor calidad posible.
  1. Aprender del fracaso: cuando conformamos una empresa lo más complicado es hacer cosas que nunca antes habíamos hecho, hay que tener claro que nos caeremos, que luego de pararnos nos volveremos a caer, pero al final esas experiencias negativas son para aprender de ellas, pueden variar desde experiencias de trato con clientes, como cobrar, plazos, etc. Lo que debemos hacer es aprender de estas experiencias y establecer pilares para tu empresa, que sean los que rijan y den sustento a la gestión de tu negocio. Después de un tiempo en el mercado, sabras enfrentar de mejor manera las malas experiencias, esto se logra mediante la implementación de medidas de protección para la empresa y los clientes, como lo son: definir plazos, cantidad de reuniones, formas de pago, etc. Todos los aspectos que permitan resguardar tu trabajo y empresa.
  1. El momento es ahora: su título lo dice todo, siempre estamos a la espera de las mejores condiciones, momentos con menos trabajo, o con más no sé qué, en la práctica nunca estarán las condiciones ideales, es por esto que lo mejor que puedes hacer, es apenas tienes la idea de implementar un servicio, desarrollar un proyecto, simplemente hazlo, no vivas esperando cosas o condiciones que jamás llegarán, todas las empresas pasan por la mismas dificultad, sin embargo ¿cómo se diferencian las que tienen éxito? en su forma de enfrentar y aprovechar estos contratiempos, estos dan oportunidades al mercado para crear soluciones, así que ya sabes, cuando tengas dudas de cuando es el mejor momento, la respuesta es una sola; “¡el momento es ahora!”.
Fuente: Gestión24

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